El plástico, un material que ha causado tanto daño al planeta, también puede tener beneficios significativos si se aprende a utilizar de manera adecuada, o más precisamente, reutilizarlo. Tras pruebas e investigaciones exhaustivas, Ingrid Vaca Diez, una abogada boliviana, encontró una manera eficiente de construir viviendas utilizando materiales reciclados, incluyendo botellas de vidrio, cemento, cal, arena, pegamento, sedimentos y residuos orgánicos, además de las botellas PET. En el año 2000, construyó su primera casa utilizando este método innovador, que tenía 170 m² y requirió aproximadamente 36.000 botellas PET de 2 litros.
Ingrid Vaca Diez, creadora del proyecto «Casas de Botellas». Construye casas utilizando botellas PET entre otros materiales reutilizables.
El método de construcción ideado por Vaca Diez implica llenar las botellas, atarlas y luego fijarlas con una mezcla de cal y cemento. Según sus estimaciones, una casa puede ser completada en tan solo 20 días, con la colaboración de los futuros residentes. Hasta el momento, se han construido 300 de estas casas, brindando hogares a familias necesitadas en diversas regiones.
Se compran 1.000.000 de botellas por minuto o 20.000 por segundo. Menos del 50% se recolecta para reciclaje.
En el corazón de este esfuerzo se encuentra una doble misión: reducir la cantidad de desechos plásticos que contaminan nuestro entorno y al mismo tiempo proporcionar viviendas asequibles y sostenibles para aquellos que más lo necesitan. Las botellas PET, que de otro modo podrían terminar en vertederos o contaminando nuestros océanos, se convierten en bloques de construcción duraderos y resistentes, que no solo ofrecen un techo sobre la cabeza, sino también la esperanza de un futuro más brillante.
El proyecto "Casas de Botellas" ha trascendido fronteras, extendiéndose a países como Argentina, México, Panamá, Uruguay, además de Bolivia. Se tiene planificado expandir la iniciativa a Brasil, aprovechando la cultura de reciclaje más avanzada de ese país, lo que facilitará la recolección de las botellas PET necesarias para estas construcciones.
En la construcción de la primera casa, de 170 mt2, utilizó cerca de 36 mil botellas PET de 2 litros.
Estas acciones ejemplares nos recuerdan que cada pequeño esfuerzo cuenta en la lucha contra la contaminación y la preservación del medio ambiente. Proyectos como "Casas de Botellas" nos llenan de esperanza y nos acercan un paso más hacia una solución sostenible para los desafíos ambientales que enfrentamos. Cada iniciativa, por pequeña que sea, contribuye significativamente a la construcción de un futuro más saludable y sostenible para nuestro planeta.
Comments