En muchos episodios de la historia existen luchas en desigualdad de condiciones, "pequeños" luchadores que se agigantan y enfrentan a adversarios mucho más poderosos todo por una causa en común.
En esta oportunidad, en nuestro país, un humilde campesino, al ver el inminente deshielo de los glaciares de la Cordillera Blanca, en Huaraz, demandó a la compañía alemana RWE por los riesgos que el cambio climático había traído a su ciudad y que afecta terriblemente las actividades agrícolas de los cuales dependen.
Nos referimos a Saúl Luciano Lliuya, agricultor huaracino, quien con su familia y otros agricultores de la zona, se sustentan con los productos de su cosechas, como la papa, el maíz, el trigo y otras hierbas aromáticas. Pero lamentablemente, en los últimos años, las temporadas de buenas cosechas han disminuido debido a que sus sembríos ya no reciben el agua de su principal fuente, la que durante siglos descendía desde los glaciares a través de las quebradas y los ríos. El cambio climático está dejando al Perú y el resto de países andinos sin sus nevados, lo cual haría desaparecer el agua para los más de 120 mil pobladores de la capital ancashina.
Y no es todo.
Ante ese panorama, es más que probable que, en un corto plazo, se presente una gran sequía que afectará tremendamente a la agricultura, el ecosistema y la vida de los habitantes.
Por otro lado, la laguna de Palcacocha enfrentaría un alto riesgo de desembalse, puesto que tiene actualmente más de 17 millones de m3, a comparación de los 8 millones que tenía a mediados del siglo pasado.
RWE, la empresa denunciada.
Fundada en 1898, Rheinisch-Westfälisches Elektrizitätswerk - RWE, es una empresa alemana del sector energético cuyas 27 filiales distribuyen energía eléctrica, gas y agua a Europa, América del Norte, además de Chile y Brasil, pero no en Perú.
En el 2013, el Climate Accountability Institute y el Carbon Disclosure Project revelaron que esta transnacional es una de las mayores contaminadoras con anhídrido carbónico (CO2) en el mundo, por la quema de carbón, responsable del 0.5% de emisiones de gases de efecto invernadero.
La denuncia interpuesta por Lliuya, con el respaldo de la ONG Germanwatch, comprende que dicha empresa asuma la responsabilidad de los daños medioambientales y pague por los costos de proteger a la ciudad de Huaraz así como su propiedad ante una eventual inundación.
Hasta el momento, la denuncia presentada en el 2015, en primera instancia fue desestimada por un tribunal alemán, pero luego fue valorada en un tribunal de Hamm, por lo cual han recabando evidencias sobre el caso, publicándose un informe confidencial en noviembre del 2023, que se hará público en los próximos meses, cuando el proceso llegué a su recta final.
Conclusiones.
Este caso sería un importante precedente para la humanidad, ante la contaminación producida por el industrialismo de muchas empresas mineras y transnacionales, explotando irracionalmente recursos naturales, acumulando grandes capitales, acelerando los efectos del cambio climático, y que hoy afecta a los países pobres y en vías de desarrollo.